viernes, 17 de agosto de 2012

Y otra lamparita de mesilla

En este caso la de mi otra hija, que ya ni tengo más hijas ni más lámparas de mesilla que poneros.

Esta me gusta más que la otra, pues quedó como más abstracta y eso me va más.

Cuando abrí esta lámpara para iniciar la decoración, tenía roto un trocito en la parte de arriba, así que tuve que utilizar la pasta de papel con el fin de tapar el desaguisado. Luego pinté la pasta en tono chocolate.

Lleva un decoupage con motivos en naranja y el fondo de la parte baja en marrones para que los colores no desentonaran.

Terminé haciéndole con un tubito cargado de pintura unas líneas sin ton ni son. El resultado me gustó, la verdad. No da apenas luz, pero queda aparente.

Lamparita de mesilla


Esta es la lámpara que le hice a mi hija mayor para su mesilla. Es de las de Ikea de 1,99 €, que son de cristal opaco blanco. No dan mucha luz, pero son aparentes y prácticas a la hora de decorarlas.
Está pintada a rayas malvas ayudándome con cinta de carrocero por aquello de no desviarme mucho en las verticales y luego lleva unas flores en papel pegadas con cola blanca sobre el cristal.
Como fue la primera que hice no me dí cuenta de que había puesto la decoración justamente en la cara de salida del cable, como veis. En la segunda, la de mi hija pequeña, el fallo ya no se produjo, pues estuve bastante al tanto de no meter la zarpa como en ésta.

viernes, 10 de agosto de 2012

Calas

Esta ha sido mi única pintura aparte de los dibujos que hacía de chica y los petardos que me salían en dibujo técnico en mi época estudiantil en el instituto. Nada que ver, por supuesto. Me costó varias clases poder terminarlo, y siempre con la supervisión y ayuda de la profesora en aquella época, pero debo decir que estoy orgullosa del trabajo que hice sobre una madera de contrachapado. Luce en un pasillo de mi casa.